Años 30 del siglo pasado.
Una chica posa en la playa frente a las casas de la calle Sagasta.
Se distingue el muro rompeolas que protegía las casas de las grandes mareas. Recordar que en aquella época, a veces, con los grandes rebosos, como las “mareas del Pino”, el agua conectaba poniente (Las Canteras) con naciente del istmo.
Desconocemos quién es la persona retratada, así como el autor de la fotografía.
