La vida nos arrebató por segunda vez a Kaisa, y esta vez definitivamente. Me atrevo a escribirles unas pocas líneas de recuerdo sin otro fin que ayudarles y ayudarme a recordarla por siempre como la conocieron sus viej@s amig@s; jovial, alegre, deportista, cariñosa. Con su franca sonrisa.
La vida no te deja de sorprender; “la razón de la vida es la sin razón” dijo alguien alguna vez. A Kaisa la sin razón de la vida la hizo cambiar y nos la quitó por primera vez. La definitiva, y anunciada vez, ya no era ella. Ya no era nuestra Kaisa.
Quiero que recuerden a Kaisa, yo lo hare, como la chica jovial y guapa de la foto que encabeza este recordatorio. No me cabe la menor duda que ella luchó, tras enfermarse, todo lo que pudo y más para ser la autentica Kaisa. La sin razón de la vida venció, fue más fuerte. Su lucha hasta el final se merece nuestro no olvido.
Descansa en paz Kaisa.
Tino Armas