El cherne en Canarias es, junto al mero y el abade, uno de los pescados de fondo más cotizados. Tradicionalmente se comercializa procedente de Mauritania y Senegal, donde se pesca con líneas y trasmallos. Su interés comercial es muy alto.
Es el principal protagonista del famoso sancocho canario. Y si, del sancocho del día anterior sobró algo, podemos aprovecharlo para esta singular receta de albóndigas. El sabor de las semillas de cilantro les da ese gusto tan canario nuestro.
Ingredientes:
1/2 kg. de cherne salado.
Unas ramas de perejil.
Migas de medio pan mojadas en leche.
2 ajos.
2 huevos.
1 cucharada de mantequilla.
1 naranja agria.
Pimienta negra y semillas de cilantro.
Azafrán, sal, aceite, azúcar, una hojas de laurel y una cebolla.
Elaboración:
Se pone el cherne en remojo en agua durante toda una noche y luego se cocina con unas hojas de laurel. Se deshace muy finamente, asegurándose de limpiarlo bien de espinas. A esto se le añade el perejil (muy bien picado), la miga de pan, los ajos picados, el zumo de naranja o de limón, la mantequilla, los huevos batidos, la pimienta negra, las semillas de cilantro bien molidas y un poco de azafrán. Se amasa todo muy bien y se deja reposar un par de horas en el frigorífico.
Luego, se forman las albóndigas, que se pasan por harina y se fríen. Para la salsa, se sofríe la cebolla bien picada con una cucharada de azúcar, unas hojas de laurel y un poco de sal en el mismo aceite utilizado para freír las albóndigas. Se elabora así una salsa de cebolla y, si es necesario espesarla, se le añade una cucharada de harina.
Las albóndigas se sirven en una bandeja, acompañadas de papas fritas, y la salsa de cebolla se presenta aparte en una salsera.