Se supone que el día anterior nos comimos un buen potaje de acelgas y hemos guardado los tallos, pensando en preparar esta receta al día siguiente. Por desgracia, esta preparación está desapareciendo de nuestras mesas. Recuerdo a mi gente preparándola por necesidad; hoy sería un auténtico lujo.
Ingredientes
Tallos de acelgas, 1 zanahoria, un huevo, harina, 2 cucharadas de salsa de tomate, una taza de caldo o media pastilla de avecren, 1 cebolla, 1 huevo, una taza de harina, vino blanco, aceite de oliva y sal marina.
Elaboración
Limpiamos los tallos de acelga, retirándoles las hilachas, y luego los sancochamos con una pizca de sal marina hasta que estén tiernos. Retiramos del fuego y dejamos reposar.
Para preparar la salsa, calentamos un poco de aceite en una sartén y hacemos un sofrito con la cebolla cortada en dados pequeños y la zanahoria raspada y picada finamente. Cuando el sofrito empiece a dorarse, añadimos una cucharada de harina bien disuelta en un poco de vino blanco, un vaso de caldo (o media pastilla de Avecrem), sal marina al gusto y una cucharada de salsa de tomate. Dejamos cocer a fuego lento durante unos diez minutos y luego pasamos la mezcla por el pasapurés.
Escurrimos bien los tallos y los pasamos primero por harina y luego por huevo batido. A continuación, los freímos en una sartén con aceite bien caliente. Cuando empiecen a dorarse, los retiramos y los dejamos escurrir sobre papel de estraza o papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
Por último, servimos los tallos en una fuente y los bañamos con la salsa bien caliente.