Seguimos descubriendo lugares de la bahía de El Confital.
Salimos del auditorio dirección el Atlante, ya hemos explicado en otro post como llegar. Tras dejar el monumento del escultor Tony Gallardo seguimos caminando hacia el norte de la isla, en paralelo a la carretera que circula a nuestra izquierda.
Mientras caminamos por el sendero habilitado, debemos saber que estamos paseando sobre terreno ganado al mar. Tierra añadida que sepultó la popular e histórica peña de la Gaviota y la llamada playa -de callaos- del Rincón. Dicho relleno también enterró para siempre los restos del desaparecido balneario del Cristo Rincón, que se encontraba en la misma orilla del mar. Sólo nos recuerda la existencia del balneario la casona amarilla que está a media loma, que era donde se hospedaban sus clientes.
Recuerden que a la izquierda mientras caminamos dirección norte vemos un museo geológico único. El paleoacantilado del Rincón.
Ya nos queda poco para llegar a Caleta Mansa, que es una pequeña caleta asocada de las olas justo debajo, y a la derecha mirando al mar, de la casa “Las Rocas” (popularmente llamada casa de Tino Montenegro). Desde dicho punto tenemos una espectacular visión de la maravillosa bahía de El Confital.
Como curiosidad, cerca de la casa (dirección Costa Ayala), hay unos bajos y rocas con el peculiar nombre de Bajos de Agustín Diablo. Siguiendo la costa, encontramos la Punta del Morro, Punta Cumplida, Punta Sobrero, etc.