El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria a través de Ciudad de Mar ha incorporado estos equipamientos para seguir avanzando en la seguridad, la accesibilidad y el bienestar de los usuarios y los socorristas.
Gracias a una subvención de 111.141 euros concedida por la Consejería de Presidencia del Cabildo de Gran Canaria, se han adquirido tres nuevas torres de vigilancia, para actualizar el servicio de vigilancia y socorrismo; cinco pasarelas accesibles enrollables; y un dispositivo de reanimación cardiopulmonar automático Autopulse, que permitirán ofrecer un mejor servicio a los usuarios de la playa, reforzar la movilidad accesible en la arena y avanzar en la condición de espacio cardio seguro de la playa.
Con estas actuaciones, la concejalía de Ciudad de Mar continúa avanzando en la mejora de los servicios y equipamientos de Las Canteras, apostando por una playa segura, accesible y sostenible.
“La renovación de los equipamientos de salvamento y la instalación de pasarelas accesibles responden al compromiso del Ayuntamiento con la calidad de los servicios, la inclusión y la sostenibilidad en una playa que es referente internacional”, destacó el concejal de Desarrollo Local, Turismo y Ciudad de Mar, Pedro Quevedo.
Las tres nuevas torres de vigilancia se han instalado en el entorno de las calles Tomás Miller, Olof Palme y Almansa, reforzando los puntos de control del servicio de socorrismo en la playa .
En un principio dijimos que serían seis en total, pero fue un error: serán cuatro.
Con un diseño exterior de color blanco, estas estructuras destacan por su resistencia a los ambientes marinos y salinos, su pavimento y suelo antideslizante, y su estanqueidad ante el agua. Incorporan además ventanas abatibles con cierres y tapas antivandálicos, mástil para bandera, megafonía alimentada por energía solar, punto SOS, wifi y sistema de carga para elementos eléctricos de bajo consumo.
Las torres, con una superficie aproximada de ocho metros cuadrados, cuentan con ruedas para su desplazamiento y una altura total de 4,30 metros sobre la estructura, garantizando una visión óptima de la zona de baño por parte del personal de salvamento y socorrismo.







