La Tierra acaba de experimentar sus tres meses más cálidos registrados, según el Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S), financiado por la Unión Europea e implementado por ECMWF. Las temperaturas globales de la superficie del mar alcanzaron máximos sin precedentes por tercer mes consecutivo, y la extensión del hielo marino antártico se mantiene en un mínimo histórico para esta época del año.

Agosto fue el mes más caluroso registrado, superando por un amplio margen al segundo mes más cálido, julio de 2023, según los datos de ERA 5 del Servicio de Cambio Climático de Copernicus. Se estima que agosto en su conjunto fue alrededor de 1,5 ° C más cálido que el promedio preindustrial para el período de 1850-1900, según el boletín climático mensual de C3S.

Hasta ahora este año (de enero a agosto) es el segundo más cálido registrado, solo superado por 2016, cuando ocurrió un poderoso evento de calentamiento de El Niño.

En conjunto, agosto registró las temperaturas medias mensuales más altas de la superficie del mar registradas en cualquier mes, con un promedio de 20,98 ° C. Estas temperaturas superaron el récord anterior, que se remonta a marzo de 2016, todos los días durante el mes de agosto.

La extensión del hielo marino antártico se mantuvo en niveles mínimos históricos para esta época del año, registrando un valor mensual un 12% por debajo del promedio, siendo la mayor anomalía negativa para el mes de agosto desde que comenzaron las observaciones satelitales a fines de la década de 1970. La extensión del hielo marino del Ártico fue un 10% inferior al promedio, aunque considerablemente por encima del mínimo récord registrado en agosto de 2012.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) utiliza los datos de C3S y otros cinco conjuntos de datos internacionales para llevar a cabo sus actividades de vigilancia del clima y generar informes sobre el estado del clima.

Un informe publicado en mayo por la OMM y la Oficina Meteorológica del Reino Unido pronosticó que existe una probabilidad del 98% de que al menos uno de los próximos cinco años sea el más cálido registrado, y un 66% de probabilidad de que se supere temporalmente un aumento de 1,5 ° C por encima del promedio de 1850-1900 en al menos uno de los cinco años. Esto no implica que se supere permanentemente el nivel de 1,5 ° C especificado en el Acuerdo de París, que se refiere al calentamiento a largo plazo durante muchos años.

Nuestro planeta acaba de experimentar una temporada de calor intenso, marcando el verano más cálido registrado. El colapso climático ha comenzado, y los científicos han estado advirtiendo durante mucho tiempo sobre las consecuencias de nuestra adicción a los combustibles fósiles. El aumento de las temperaturas exige una acción inmediata, y los líderes deben intensificar sus esfuerzos para encontrar soluciones climáticas. Todavía tenemos la oportunidad de evitar lo peor del caos climático, y no podemos darnos el lujo de perder más tiempo”, declaró el Secretario General de la ONU, António Guterres.

“En el hemisferio norte, hemos experimentado un verano de extremos, con olas de calor recurrentes que han alimentado incendios forestales devastadores, afectando la salud, interrumpiendo la vida cotidiana y causando un daño duradero al medio ambiente. En el hemisferio sur, la extensión del hielo marino antártico ha alcanzado niveles sin precedentes, y las temperaturas globales de la superficie del mar han vuelto a establecer nuevos récords. Es importante destacar que esto está ocurriendo ANTES de que veamos el impacto completo del evento de El Niño, que generalmente se desarrolla en el segundo año después de su inicio”, afirmó el Secretario General de la Organización Meteorológica Mundial, Prof. Petteri Taalas.

“Ocho meses después de 2023, hasta ahora estamos experimentando el segundo año más cálido registrado, con apenas una pequeña diferencia respecto a 2016. Se estima que agosto estuvo alrededor de 1.5 ° C más cálido que los niveles preindustriales. Lo que estamos observando no son solo nuevos récords de temperatura, sino la persistencia de estas condiciones extremas, y los impactos que tienen tanto en las personas como en el planeta son una clara consecuencia del calentamiento del sistema climático”, comentó Carlo Buontempo, Director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, ECMWF.

Fuente: Organización Meteorológica Mundial