El velero o barquito de San Pedro es una medusa (aguaviva) de vida pelágica, es decir, que flota en el océano dejándose llevar por el viento, gracias a su “vela” con forma de media luna, y por las corrientes.
La Velella velella tiene un característico cuerpo plano y ovalado con una vela triangular en la parte superior, que le permite desplazarse por la superficie del agua impulsada por el viento. Su coloración es típicamente azulada o violeta.
Es un organismo colonial, como la fragata (carabela) portuguesa. Aunque, al ser más pequeño (4-8 cm de diámetro) y tener una picadura “inofensiva”, pasa más desapercibido.
Al ser un organismo colonial, dispone de individuos diferenciados. Uno se encarga de la nutrición, ubicado en la parte inferior del velero, y se alimenta de pequeños organismos planctónicos. Los individuos especializados en la reproducción se disponen en una corona interior, y los encargados de capturar el alimento y de la defensa se sitúan en la parte exterior.
Entre sus principales depredadores se encuentran los moluscos del género Janthina, las babosas marinas Glaucus atlanticus y diversas especies de tortugas marinas.
Viven en la superficie del océano, principalmente en aguas templadas y tropicales, y son conocidas por formar grandes agrupaciones que pueden ser arrastradas hacia las costas. Su distribución es cosmopolita, encontrándose en todos los océanos del mundo, aunque son más comunes en el Atlántico y el Pacífico.