Hola Lola:
Hace ya casi un año que te despediste de nosotros aunque, para ser sincero, la verdad es que no te has ido tan lejos como algunos puedan pensar. Aquí te sentimos cada día con cada detalle cotidiano que pueda pasar y nos recuerda a ti. Un año parece mucho tiempo, ¿verdad?, pues todo lo contrario, ha pasado en un instante, en un suspiro, pero imagino que será porque siempre has estado con nosotros, ayudándonos y observándonos allá donde estés. Me encantaría preguntarte un montón de cosas, pero sé que no las puedes responder, así que me conformaré con saber que puedes percibir esta carta. Al principio parece difícil resignarse o comprender una despedida tan rotunda hasta que, por razones obvias, comprendes que ese llanto de tristeza se transforma en serenidad y tranquilidad, momento en el que, particularmente en mi caso, o mejor dicho, en el de todos, te hemos sentido junto a nosotros.
Tengo que decirte que tu playa de Las Canteras sigue igual, con ese maravilloso sol que dibuja cada mañana un amanecer diferente para darnos los buenos días y se despide cada tarde con mil colores, desapareciendo lentamente en el horizonte, recordándonos la llegada de un nuevo día, te acuerdas ¿verdad?; y como olvidarme de ese mar que muchas veces parece dibujar tu silueta nadando por la Peña la Vieja como siempre hacías, o caminando por la orilla dejando esas huellas imborrables en el tiempo… en fín, ya te he dicho antes que con cada detalle cotidiano, como estar en la playa, así como en tantos otros lugares, nos sentimos más cerca de ti.
Recuerdo que siempre nos decías que había que estar alegre e intentar ser felices pasara lo que pasara, que había que mirar hacia adelante y aprender de las cosas lindas que nos regala la vida. Por eso, Lola, te pedimos, ya que has decidido irte tú primero hacia ese mundo diferente al nuestro, nos sigas ayudando a ser tal y como tú deseabas que fuésemos, felices, y que nos ayudes a disfrutar la vida con alegría.
Bueno Lola, acabo esta pequeña carta deseándote “Feliz Navidad”, tal y como tú nos la inculcaste a cada uno de nosotros, tal y como tú nos la hiciste ver y sentir, realmente algo maravilloso. Como bien sabes, la despedida no es mi punto fuerte, ni tampoco escribir cartas muy largas, así que me despido con un fuerte beso de todos tus nietos que te quieren, estoy totalmente seguro que lo recibirás…
Tal y como tú te despedirías…poropopó…poropopero
Feliz Navidad” Lola”
Tus Nietos.