Picadura de Medusa
¿ Qué es una picadura de medusa?
La presencia de medusas en nuestras costas se convierte en un hecho relativamente frecuente.
Este fenómeno natural no puede ser detenido, ya que no depende de la voluntad del hombre. Las medusas no atacan por placer. Presentan unas células urticantes, conteniendo en su interior un veneno. Cuando una medusa suelta su veneno, es para cazar o para defenderse de algún peligro.
Por norma general, las picaduras de medusas no suelen ser graves, aunque siempre hay excepciones. Si hay algo que caracteriza a estas picaduras es la molestia y el ardor que presentan.
Síntomas de la picadura de medusa:
Los síntomas comunes a las picaduras de medusas sin contar con que el paciente sea alérgico o tenga algún tipo de enfermedad que haga variar estos, son:
– Dolor
ardor
– Inflamación
– Enrojecimiento
– Sangrado
RECOMENDACIONES SANITARIAS EN CASO DE PICADA DE MEDUSAS.
Cómo evitar las picaduras
• No subestimar la situación. La única manera de evitar las picaduras es no bañarse, ni siquiera en la orilla, ni mojarse con agua recogida en cubos, que puede contener fragmentos.
• No tocar nunca las medusas, ni siquiera las que quedan varadas en la arena o los fragmentos de ellas, pues el poder urticante persiste aunque estén muertas.
• Si se ha tocado alguna, aunque no se haya tenido ningún tipo de reacción, no llevar las manos a los ojos o boca, ya que son zonas mucho más sensibles.
• Atender y seguir las indicaciones y advertencias que existan en la playa (megafonía, carteles, señales, banderas…) o difundidas a través de los medios de comunicación.
• Si se ven medusas y no existe ningún aviso, informar al puesto de vigilancia más cercano o a las autoridades locales.
• El uso de cremas de protección solar, puede disminuir el riesgo de picaduras, pero no las evita totalmente.
• Utilizar prendas protectoras que cubran la totalidad de la superficie corporal (gafas, trajes de neopreno, guantes, escarpines…).
• Los niños son especialmente sensibles: vigilarlos e instruirlos y no bañarlos, en ningún caso.
• Grupos de riesgo: niños, ancianos, personas con antecedentes alérgicos, cardiovasculares o asmáticos, o que hayan sido picados previamente por medusas, deben evitar el contacto con medusas.
Cómo actuar en caso de picaduras
• NO rascar o frotar la zona afectada, ni siquiera con una toalla o con arena, esto no hará más que activar los cnidocitos restantes, por efecto de la presión.
• Lavar la zona con suero fisiológico, en su defecto agua de mar asegurándose de que no contenga fragmentos de tentáculos, pero nunca con agua dulce.
Proliferación de organismos marinos en Canarias
• NO aplicar amoniaco, orina o vinagre.
• En caso de no poder acudir a un puesto de salvamento y socorrismo, quitar los restos de tentáculos adheridos a la piel con pinzas; en su defecto puede usarse algún objeto de borde fino.
• Para aliviar el dolor aplicar frío, hielo, de forma intermitente, durante unos 5-15 minutos, sin frotar y evitando el contacto directo del hielo con la piel. Nunca aplicar calor, ni exponer la zona afectada al sol.
• Sintomáticamente, pueden utilizarse geles o pomadas específicas, antihistamínicos y analgésicos.
• En caso de herida, se aconseja la aplicación de un antiséptico, tres veces al día, hasta que cicatrice la herida.
• Acudir al puesto de socorro de la playa o al centro de salud más cercano.
• Si la persona afectada tiene antecedentes de picaduras, vigilar la posible aparición de reacciones alérgicas inmediatas o tardías.
ATENCIÓN: si se observan síntomas generales como náuseas, vómitos, mareos, calambres musculares, cefalea, dificultad respiratoria o malestar generalizado, acudir al centro asistencial más próximo o llamar al 112, informando, si es posible, de la especie de medusa que produjo la picadura.
Fuente.