La playa de las Canteras no es sólo una playa,
sino el lomo de un gigantesco dinosaurio
que duerme una siesta de milenios interminables.
En el lomo horadan sus agujeros
los cangrejos atribulados y los erizos pusilánimes
y sobre él se dedican a aparearse las tribus de los monos desnudos.
La playa de las Canteras no es sólo una playa,
sino una alfombra de pétalos de arena
a donde van a morir las mariposas acuáticas
los gusanos del aire
los peces de fuego
las palomas de tierra
y los suspiros de las mareas.
La playa de las Canteras no es sólo una playa
sino la excusa de mis deseos.
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