Durante el año 2021 fallecieron un total de 63 personas en el mar. Esta es la cifra más alta desde 2017. De hecho, el pasado año murieron más personas por accidentes acuáticos que por accidentes de tráfico
¿Cómo es posible esto en un archipiélago que depende exclusivamente del turismo?
La seguridad de nuestras costas es un aspecto vital y forma parte de la economía de nuestras islas. Es un motor fundamental del sector turístico. Sin embargo, los socorristas no contamos con todas las garantías para desarrollar nuestro trabajo y ayudar a que esta situación cambie para aumentar la seguridad. Por todo ello, hemos impulsado la creación de una Sección Sindical de Socorristas que es pionera en las Islas Canarias.
Pese a los datos mencionados con anterioridad, la función de un socorrista está poco valorada. De hecho, ni siquiera tenemos un convenio colectivo propio como el que sí tienen otras profesiones. Nuestra profesión tiene muchos riesgos como cáncer de piel, pérdida de visión, traumatismos, fascitis plantal, accidentes acuáticos, entre muchos otros y no cobramos ningún tipo de plus de peligrosidad.
Los socorristas somos profesionales cualificados, preparados y con vocación por ayudar, pero estamos sometidos a unas condiciones injustas por parte de empresas y ayuntamientos. Es frustrante que una persona pierda la vida en nuestras aguas cuando se podía haber evitado aumentando la inversión. La precarización del sector en Canarias se debe a que desde años se ha establecido un sistema de licitaciones a concurso con oferta a la baja, por lo tanto, la empresa que tiene la oferta más baja es la que gana, creando así una precariedad a lo largo de los años. Es decir, los ayuntamientos al final se ahorran un dinero que debería emplearse en la seguridad de sus ciudadanos.
Esto no se puede seguir siendo así. Por ejemplo, hablando de Las Palmas de Gran Canaria: la playa de La Laja, EL Confital y Las Alcaravaneras deberían estar cubiertas todo el año ya que están cerca de un núcleo urbano y son playas en las que pasan incidencias y hay muertos. Como, por ejemplo:
El día 21 de diciembre del 2020, el GES recupera un cuerpo sin vida de El Confital.
El 5 de junio de 2021 otro cuerpo sin vida de una mujer fue rescatado en la playa de La Laja.
El 25 de diciembre de 2021 el helicóptero del GES tuvo que rescatar a un hombre en la playa de El Confital.
El 11 de febrero de 2022 en La Laja falleció otro pescador al caer al mar.
Quizás si las playas hubieran estado cubiertas todo el año esto no hubiera pasado.
Otro ejemplo, en la playa de Las Canteras ahora el Ayuntamiento cambió el horario y ahora entramos a las 12:00 horas del mediodía ¿Los usuarios que van a las 10 de la mañana no tienen derecho a estar seguros en la playa?
Los socorristas solucionamos con discreción multitud de incidentes a diario. Somos protectores invisibles que no estamos valorados por las instituciones, solo somos números. Las empresas realmente poco pueden hacer para cambiar esta situación, es cuestión de los ayuntamientos y el cabildo. Cuando intentamos hablar con el ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, este nos trasladó que no iban a reunirse con nosotros, luego cuando tuvimos más repercusión si aceptaron la propuesta de reunión.
No entendemos como un socorrista, que pone en riesgo su vida para proteger a la gente que quiere disfrutar de nuestras playas, sólo cobre el salario mínimo interprofesional teniendo una formación específica. La propia profesión de socorrista ha evolucionado mucho durante los últimos 20 años. Hablamos de gente perfectamente cualificada y profesional que se dedica a esta profesión vital. No obstante, muchos socorristas válidos tienen que buscar otro empleo dado que tanto las condiciones como el sueldo no son suficientes para llegar a final de mes, formar o mantener una familia. También ocurre que profesionales con muchos años de experiencia tengan que dejar el socorrismo por la precariedad existente.
Con la creación de esta primera Sección Sindical de Socorrismo en Canarias queremos dejar una herencia a las generaciones venideras y una mayor seguridad para los bañistas de nuestras costas. Nos emocionamos al ver cómo la gente está a favor de nuestra lucha, que realmente es la de todos los usuarios de la playa, porque todos queremos que nuestros seres queridos estén protegidos. Además, la seguridad es un concepto del que todos somos partícipes. Nada vale más que la vida, la vida se nos escapa un en un instante y debemos poner los mejores medios para asegurarla lo máximo posible.
Como dijo Albert Espelt en la gala de los Goya: “La gente cuando ve un socorrista en la playa lo que piensa es: un chavalín sacándose unas perras en verano. No es así, lo nuestro es una profesión que solo nos la reconocen la gente a la que salvamos la vida y sus familiares”.
Estamos orgullosos de salvar vidas y por fin nos hemos unido para luchar por los socorristas y por mejorar nuestra profesión.
Sección Sindical Unión Socorristas Islas Canarias
Us.islascanarias.cgt
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Comentario
Juan Eugenio:
Sí, somos muchos los que nadamos travesía. En mi caso, por ejemplo, voy de las 10:30 a las 11 para estar nadando una hora y todo eso sin servicio de socorrismo. Se se que los señores de la Cruz roja me advertían si había aguavivas y yo decidía si nadar o no. Ahora tendré que exponerme y si me da un patatús, pues recogen mi cadáver y santas pascuas.