Panorámica dominical de la playa de Las Canteras, en la zona conocida como la Peña la Vieja. En la imagen se aprecian las casetas pegadas al muro de la playa, una estampa habitual de la época que años más tarde fue prohibida.
Todavía se conservaban muchas casas terreras a lo largo del paseo, que fueron desapareciendo progresivamente para dar paso a edificios de uso turístico.
Al fondo, se distingue el humo procedente de la fábrica de la Cícer.
En la década de 1970, Las Canteras vivía una transformación significativa. El auge del turismo organizado y la necesidad de infraestructuras modernas impulsaron la construcción de edificios y hoteles destinados al uso turístico.
Este desarrollo trajo consigo la pérdida de elementos tradicionales que caracterizaban la vida en Las Canteras. Las casas terreras, símbolo de una época con un fuerte sentimiento de barrio, fueron desapareciendo poco a poco para dar paso a una urbanización más densa y orientada al visitante.
Al contemplar esta imagen del pasado, uno no puede evitar dejarse llevar por la melancolía del pasado. Era una playa distinta, donde el tiempo parecía ir más despacio y cada rincón guardaba una historia compartida. La vida transcurría entre saludos conocidos, veranos interminables y el rumor constante de las olas.