La Cruz Roja ha rescatado a un bañista en apuros detrás de la Barra al mediodía de este jueves. El nadador fue arrastrado a la parte exterior del arrecife por la corriente, lo que complicó su vuelta a la orilla.
En estos casos mejor dejarse flotar y esperar a ser visto. Se recomienda no luchar nunca contra la corriente, porque se puede acabar agotado.
Un vecino del paseo se dio cuenta de la situación apurada del bañista y dio el aviso a los servicios de Cruz Roja, que los pudieron rescatar entre las olas.