Ha sido un elemento que ha decorado la playa desde los años 90, pero sus días están contados. Los propietarios del edificio han intentado que el Ayuntamiento rehabilitara la pared y el mural para dejarlo como está pero al no haber una respuesta positiva los propietarios arreglaran la medianera y la pintaran de blanco. El mural de Padorno, Premio Canarias ya desaparecido, paso sus últimos semanas con una pancarta publicitaria sobre su superficie mostrando la inoperancia municipal ante este atentando urbanístico.