Que vida tiene el paseo ¡ ya quedaron atrás aquellos tiempos donde la avenida era solo usada para dar un paseo relajado o venir a comer. Ahora el paseo es un hervidero de personas; que disfrutan de la brisa marina, que hacen deporte, que vienen a pasear con su familia, a escuchar música en directo, a ver el horizonte, mayores que vienen a estirar sus músculos agarrados a la barandilla, etc. Somos muchos y hacemos muchas cosas, el paseo tiene que adaptarse a los tiempos actuales. Que sea un paseo moderno, un lugar vivo, y agradable para locales, turistas y vecinos. Útil y seguro para toda la familia.
Para eso hay que tomar medidas, algunas drásticas, pero harán que el paseo lo podamos disfrutar cada día todos por igual, y sentirnos orgulloso de él.
La primera medida, y quizás la más polémica, es la de retranquear todas las mesas a las fachadas, no cabe otra. No podemos hipotecar metros y metros de barandilla, de espacio y visión para el beneficio privado. El consenso con los empresarios del sector es básico para llegar a un acuerdo, más cuando muchos de esos propietarios ya usan zona públicas teóricamente ganadas para la ciudadanía cuando se retranquearon las casas viejas y se construyeron nuevas. Una barandilla sin mesas hará tener el paseo y la playa más pegada al muro más limpia. El ejemplo esta en el paseo de la playa de Meloneras, nunca veras un mesa pegada al muro que da al mar. Aquí tenemos menos espacio pero es adaptable para cada local.
Sobre la contaminación visual, hay un elemento que sobresale por encima de todos, y son las casetas de los hamaqueros, son auténticos tropiezos en la visón de la playa, del horizonte canterano. Hay que estudiar una solución para minimizar su impacto sin que los trabajadores pierdan facilidad en su dura labor diaria.
Para acabar nos gustaría reflexionar sobre las bicicletas en el paseo ¿ Si dejamos que la gente haga footing en el paseo porque no permitimos las bicicletas a velocidad lenta ? La ciudad va hacia la movilidad sostenible, el paseo y sus calles adyacentes no se pueden quedar atrás. Hay zonas del paseo que las bicicletas, siempre a velocidad lenta, pueden convivir perfectamente con los usuarios. La zona de La Cicer, desde Punta Brava hasta el Lloret, la calle Sagasta peatonal, y de ahí hasta la entrada del Confital por Los Nidillos. Incluyendo el trozo de La Puntilla. Ya que la zona tiene las mesas retranqueadas y es corto. Solo queda resolver la conexión entre Punta Brava y Sagasta para completar el recorrido en bicicleta por Las Canteras, y esta seria por las calles de atrás y las peatonales. No es difícil. También contando con permitir el transito de bicicletas por la totalidad del paseo -siempre a velocidad lenta- en unas franjas determinadas del horario, que puede ir hasta las 10 de la mañana, entre semana, y hasta las 11 los domingos y días de fiesta, y por la tarde a partir de las 11 de la noche.
Todo lo expuesto y más ( seguridad, limpieza, mantenimiento, etc) es cuestión de estudiarlo, pero lo que no cabe duda que los usos, gestión y estética del paseo de Las Canteras deben adaptarse a los nuevos tiempos.
www.miplayadelascanteras.com
Ayúdanos a seguir informando día a día sobre nuestra playa: dona