Los expertos tratan de averiguar las causas de la muerte de este pequeño ejemplar de casi dos metros y unos 1.000 kilos.
Aparece nuevamente un cetáceo varado en las costas del archipiélago. En esta ocasión se trata de un pequeño ejemplar de casi dos metros que ha aparecido flotando en la zona de El Confital, en Las Palmas de Gran Canaria.
Sacarlo del agua ha sido una tarea difícil para los bomberos, puesto que se trataba de una zona escarpada y con peidras, aunque el animal no era de grandes dimensiones y pesaba unos 1.000 kilos.
Hasta el lugar se han desplazado varios expertos en cetáceos, como Pascual Calabuig, responsable del Centro de Recuperación de Fauna del Cabildo de Gran Canaria que explicaba que lo primero que tenían que hacer era averiguar las causas de la muerte.
Manuel Arvelo, profesor de la facultad de Veterinaria, también se acercó al Confital. Mientras observa el traslado del animal, explica como muchas veces indicios externos ayudan a la hora de investigar. En este caso lo único que se podía observar era alguna mordida de tiburón, mordidas que pudieron ser post-morten, ya que es muy habitual.
Este sábado se le practicará la necropsia que revelará la causa de su muerte.
Redacción Televisión Canaria