2004-2024: celebramos 20 años de vida 

Tenemos en la portada de la web una encuesta sobre la nueva imagen de las casetas de las hamacas

Las Canteras azul

Afortunadamente, nuestra querida playa de Las Canteras goza de buena salud, esto es, obtiene una puntuación de “2 puntos” -¡la máxima!- y una valoración de “buena” en el informe de Sanidad que la web miplayadelascanteras.com presenta en su sección de la actualidad playera. Así sucede también –se ve en ese informe- con la mayoría de las playas de Gran Canaria y de Canarias, lo que es motivo de gran alegría, especialmente en estos tiempos de preocupantes cambios climáticos y desastres ecológicos, naturales o producidos por la mano del hombre, que la prensa airea en el mundo: lejanos tsunamis, calentamiento del planeta, subida del nivel del mar, vertidos incontrolados, almacenamiento de residuos atómicos, etc.

En la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, nos llama la atención nuestra no menos querida Alcaravaneras (“playastra” de Las Canteras), sólo “apta para el baño”, lo que rebaja su valoración con respecto a su hermana mayor e incluso con La Laja; y es que no es lo mismo una barra natural que un muelle con barcos portacontenedores y petroleros como horizonte, o un paseo remozado que otro oliendo a aguas menores, con balsosas sucias y levantadas y retorcidos hierros al aire donde pobres mendigos pasan las noches. No sabemos si esta cara de la ciudad está sacrificada por la importancia del puerto o si está a la espera de algún gran proyecto como la polémica Gran Marina. Acaso después de mayo lo sepamos.

Para una isla que vive del turismo y disfruta de sus playas y clima, el buen estado de la costa y el mar es de una importancia estratégica. Sabemos que son internacionales las aguas interinsulares, lo que dificulta el control de las mismas y del tráfico marítimo. Estamos al tanto también de la tentación que supone para algunos la posible existencia de pozos petrolíferos submarinos a pocas millas de nuestras costas turísticas. Y, por último, conocemos la fuerte presión demográfica y el cultivo del ladrillo que padece la isla, y por tanto, su costa y sus playas.

Por eso el cuidado de la playa para que mantenga en el tiempo esta valiosa valoración depende de nosotros, los usuarios, y de las instituciones y de las empresas. Y aunque también puede haber buenos proyectos de desarrollo para la costa – ¡por qué no!-, debemos mantenernos firmes y vigilantes ante cualquier actuación interesada, particular e institucional, que atente con el incomparable patrimonio natural de la playa Las Canteras y demás playas insulares y regionales.

Luis del Río García

En Alcaravaneras, a 19 de noviembre de 2006

*El contador cuenta visitas desde mayo 2023

Atención: Estamos experimentando problemas que impiden que puedan dejar comentarios. Estamos trabajando para solucionarlos. Gracias por su comprensión.

Comenta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Publicidad
Contenidos destacados
Tu opinión es importante
error: Contenido protegido con derechos de autor©