El estío es una época donde se hacen posibles algunos avistamientos difíciles de encontrar el resto del año. Esto es especialmente cierto para la familia de animales que hoy nos ocupa. Nos referimos a los peces cartilaginosos.
Esta clase de animales sustituyen los huesos por cartílagos, aunque conservan la columna vertebral, lo que aún los mantiene con todo derecho en el grupo de los vertebrados. Su cuerpo es alargado y plano con formas que casi siempre tienden a la redondez y les sobresale una cola, más o menos grande, que los hace inconfundibles.
En cuanto a sus hábitos, son más bien de carácter bentónico, ya que gustan de estar próximos al suelo buscando comida e incluso enterrarse en la arena para usar el camuflaje como técnica de caza.
En nuestra playa los ejemplares que suelen verse son los chuchos y las mantelinas. A los chuchos solemos encontrarlos siempre en verano y principios de otoño por Peña La Vieja, zona que han acostumbrado a frecuentar para el desove. Por la mañana, muy temprano, antes de que el hombre haga acto de presencia, pueden verse incluso varios ejemplares muy cerca de la orilla.
Las mantelinas, por su parte, son más bien de hábitos nocturnos. En las noches de Agosto y Septiembre es posible ver algún que otro ejemplar que se deja caer a la orilla para enterrarse en suelo arenoso. Su cuerpo es generalmente más grande y alargado que el de su pariente cercano, y
tiene también una coloración más vistosa, parecida a la de una alfombra.
Es una auténtica gozada ver nadar a uno de estos animales, cuyo avancerecuerda más bien al majestuoso vuelo de un ave.
Termino recordándoles que hay que extremar las precauciones con estos animales, pues el aguijón que tienen en la cola (a veces son dos) lo usan, y muy bien, como arma de defensa ante ataques.
Les dejo algunas imágenes de estos bellísimos peces tomadas en aguas de nuestra playa.
¡A disfrutar del verano!
Salados saludos
Manuel Marichal
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